¿Qué es la ortoqueratología?
La ortoqueratología es un tratamiento que nos permite eliminar la graduación que tenemos de forma temporal mediante el uso de lentes de contacto rígidas. Estas lentes se encargan de aplanar la córnea para así conseguir el moldeo deseado para llegar a compensar la graduación. Es necesario ponérselas una media de 8 horas por la noche para que hagan un efecto completo.
Ventajas de la Ortoqueratología
- Permite tener una buena visión sin tener que ponerte gafas o lentes de contacto.
- Evita la cirugía refractiva para prescindir de usar gafas.
- Es un tratamiento reversible, en el momento que dejas de ponerte las lentes de contacto, tu visión vuelve a su forma natural.
- Son recomendadas para el control de miopía. Evitan que la miopía avance rápidamente con el paso del tiempo, con lo que la graduación aumentará menos que si no las llevases.
- Ofrecen la comodidad de poder practicar deporte sin el uso de gafas o lentes de contacto.
- Evitan la sequedad ocular que producen las lentes de contacto desechables.
- Es una opción para los trabajos en los que no te permiten utilizar lentes de contacto o gafas.
¿Qué problemas de visión corrige la Ortoqueratología?
El uso más frecuente de la Ortoqueratología es para la corrección temporal o el control de la miopía en niños. El paciente ideal es el que presenta una miopía de hasta 6.0 dioptrías, astigmatismo de hasta 1.50 dioptrías e hipermetropías de hasta 3 dioptrías.
¿Cuánto tiempo tarda en conseguir su máximo efecto?
Depende de muchos factores, especialmente de la cantidad de graduación con la que se empieza el tratamiento. Hay personas que a los dos o tres días consiguen la máxima visión, mientras que otras pueden tardar dos o más semanas hasta obtener la máxima corrección.
¿Veré bien mientras tengo las lentes de contacto puestas?
Sí, ya que las lentes de Orto-k se encuentran graduadas para compensar todo el error refractivo.
Si en los años siguientes aumenta la miopía del paciente, ¿qué medidas se toman?
Las córneas pueden ser remodeladas para adaptarse al cambio de graduación cambiando el diseño de las lentes, por lo que se le dará una lente nueva y volverá a compensar todo el error refractivo.